Las primordiales peculiaridades de la religión judía son las próximas:
- Es una religión monoteísta, puesto que cree en un solo dios, cuyo nombre comúnmente no debe pronunciarse, si bien es común emplear el nombre de Yahveh.
- Tiene múltiples libros de carácter sagrado, entre ellos el Tanaj, la Torá (sección primera del Tanaj), la Mishnà y el Talmud.
- Ejerce la circuncisión o Brit Milán, que se efectúa sobre los hombres en el 8º día de su nacimiento.
- Su día sagrado es sábado, o Shabat, quien se dedica al reposo.
- Su líder o jefe de la religión es el rabino, la figura de mayor autoridad, liderazgo espiritual y ética.
- El símbolo de hoy mucho más popular del judaísmo es la estrella de David.
- Sus días rigen a través de un calendario con combinación por mes lunar y de forma anual del sol, donde están las festividades y ocupaciones habituales del judaísmo.
- El culto se festeja en el templo o sinagoga, el sitio ceremonial más esencial de la religión.
- Su lengua sagrada es el hebreo, que sirve para todos y cada uno de los rituales y contenidos escritos sagrados.
Podcast de la charla:
¿Qué es el judaísmo?
El judaísmo es la religión del pueblo judío o hebreo, considerada la mucho más vieja forma de monoteísmo, con mucho más de 4.000 años de historia. Pertence a las tres enormes religiones abrahámicas, adjuntado con el cristianismo y el islam. Esto último quiere decir que son herederas de la historia del profeta Abraham (Ibrahim), entre los tres enormes patriarcas bíblicos, y que creen que hay un único Dios constructor.
No obstante, el término judaísmo se refiere asimismo al complejo fenómeno que es la civilización y tradición judía, donde religión, justicia y organización popular se tienen dentro en el modo perfecto de vida hebreo, al que se aferran de manera rigurosa las comunidades jaredís o ultraortodoxas. Tal es así que el judaísmo se considera, al tiempo, como una religión, una cultura y una nación.
Origen del judaísmo
Moisés fue quien liberó al pueblo de Israel y le guió de vuelta a la Tierra Prometida.
El judaísmo ubica sus orígenes en la antigüedad bíblica, particularmente en la vida de Abraham, un pastor nómada de Ur, en la vieja Mesopotamia.