¡Llegamos al martes! Fundamento por el que acercamos un nuevo particular de covers. En esta ocasión, retrocedimos en los 90s y volvimos al 2022 para oír una exclusiva versión de Losing My Religion, canción de R.Y también.M. que la artista estadounidense Soccer Mommy se ocupó de regresar, en una versión que nos deja con una sensación absolutamente diferente.
«Losing My Religion» fue lanzada en 1991 como primer single del séptimo álbum de R.Y también.M., que se titula «Out of Time». De manera rápida, se posicionó como un hit en todo el mundo. No obstante, en la época del actual año el artista de la banda, Michael Stipe, comentó en entrevista con Rick Rubin para el podcast Broken Record el concepto tras la letra determinante de la canción.
La mandolina y el concepto en “Losing My Religion”
A lo largo de las sesiones de grabación del álbum, nuestro Peter Buck deseó examinar sus habilidades como músico, comenzó a entrenar en mandolinas y se inventó de repente el característico riff de la canción que en los primeros ofrecemos se conocía como “Sugar Kane”. Entonces vinieron los acompañamientos de bajo, batería y la lírica de Stipe con lo que el tema se transformaría en “Losing My Religion”.
La canción, indudablemente, es el tema mucho más identificable del disco no solo por el excepcional instrumento que le daba leitmotiv. La letra y exactamente el mismo título manejan un concepto bien definido. Por una parte, el track charla de la sensación de inseguridad de un individuo que quiere enseñar su amor a alguien. Las líneas “I said too much” (dije de sobra) y “I haven’t said enough” (no dije lo bastante) prueban ese sentimiento de haberse sobrepasado o haberse quedado corto en la declaración cariñosa.
El éxito de Losing My Religion fue inesperado
En el podcast «Broken Record», el artista enseña lo pequeño que creyó que era el éxito en ese instante: «Lo lanzamos como el primer simple pues creemos que sería una aceptable introducción en la próxima canción». tenía «ninguna, no tenía iniciativa de que la canción sería tan bien recibida».
Asimismo recuerda haber hecho un pequeño cambio en la letra del corazón. Previamente, la letra habría dicho «Este soy yo en la esquina / Este soy yo en la cocina». Estas líneas se referían a la noción de un «alelí tímido» que «se detiene en una celebración y no se aproxima a la persona de la que está locamente enamorada».