Si bien logre parecer increíble la quiromancia es una práctica ancestral y además de esto muy popularizada por muchas unas partes del planeta, siempre y en todo momento fué identificada con una práctica esotérica poco confiable, menos mística y mucho más mágica. Se identifica entre las zonas de todo el mundo que mucho más admite y ejerce la quiromancia en la región famosa como Eurasia, que es la unión de Europa y Asia como un solo conjunto de naciones.
La quiromancia, el arte de leer las manos
Leer las manos es tan viejo que los historiadores sitúan su origen en la astrología india, en contenidos escritos chinos hace 3.000 años e inclusive en ciertos jeroglíficos egipcios. La palabra quiromancia procede del heleno estimar (mano) y manteia (adivinación), y es eso, acertar el futuro con las líneas de tus manos.
Hay una historia de historia legendaria según la que el enorme pensador Aristóteles habría sido quien trajo la quiromancia a Europa; se enseña que en una visita a Egipto halló un manuscrito en un altar que se dedica al dios Hermes, se encontraba escrito en letras doradas y trataba sobre la interpretación de las líneas de las manos. Lo tomó y lo envió a su acólito, Alejandro Magno.
Hacerse beato en Cuba
La llamada religión afrocubana es extensamente practicada en Cuba y se considera uno de sus signos identitarios y autóctonos. Si ha recorrido en algún momento por las calles cubanas, seguramente va a haber escuchado a varios nombrarse entre ellos padrino, madrina o ahijado, o vió a hombres y mujeres vestidos totalmente de blanco con collares y pulsos coloridos en sus cuerpos.
Estos individuos de blanco son los iyawos, o yaboso como se los conoce como popularmente. Ellos pasan por un desarrollo estricto de consagración para transformarse en santeros, lograr el máximo vínculo con su ángel de la guarda, el beato que los resguarda.
Signos de Osha-Ifá
En el sistema adivinatorio de Ifá se usan ciertos signos o letras que dejan materializar y transcribir el mensaje de la divinidad, estas se les conoce como Odum y son la parte escencial del mismo.
Se compone de 256 partes, que al unísono se subdividen en versos populares como este, de los que no se conoce con seguridad el número exacto que existe, calculándose unos ochocientos este por odum.
Gitanas solo se casan con gitanos
“No nos atrae combinar nuestra raza por el hecho de que son nuestros ancestros los que se casaban solo las gitanas con los gitanos”.
Sobran señalamientos que manchan la reputación de la civilización gitana, aun hay incontables refranes que los relacionan con el hurto, entre otras muchas cosas, frente esto Rocío de 17 años, tiene un deseo: “Que dejaran de vernos como personas malas, pues de todos modos no lo somos, somos personas normales, como toda la multitud, mudar nuestro origen o cultura, no nos agradaría”.
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