Leer la Biblia, si bien de enorme interés, es asimismo una experiencia desasosegando conforme vas conociendo prohibiciones que ignorabas y que quizás ahora hayan culpado tu alma sin antídoto: no puedes herir a tus esclavos en los ojos, ni comer búhos , ni guisar el cabrito en la leche de su madre, ni acostarte con tu suegra, entre tantas otras cosas. La una parte de las exhortaciones es mucho más agradable, pero sugiere reemplazar el agua por el vino y, por encima de todas las cosas, cantar. Los autores del libro sagrado eran unos obstinados melómanos y ahora en exactamente el mismo Génesis se asigna a los músicos un ilustre estirpe, nada menos que el de Caín… lo que enseña bastantes cosas.
En las próximas páginas prácticamente toda ocasión funciona bien para ponerse a cantar, bailar y tocar garras, salterios, tamboriles, reclamos y trompetas, mientras que se reconoce a individuos tan importantes como David, Salomón y Moisés como músicos , e inclusive «las montañas y los cuellos van a levantar canción enfrente de usted». Hasta este punto importa este arte que, de llevar a cabo caso a las visiones del Apocalipsis, quienes consigan la salvación se distinguen pues «cantaban un cántico nuevo frente al trono, y frente a los 4 seres vivientes, y de los jubilados; y absolutamente nadie podía estudiar el cántico sino más bien esos ciento 40 y 4 mil que fueron redimidos de entre los de la tierra». Como conclusión, no es de extrañar que muchos músicos durante la historia se hayan sentido concernidos por la Biblia, encontrando inspiración en ella e inclusive citando sus versos en las letras.
Hay incontables ejemplos, conque seleccionaremos los mucho más populares y, quien lo quiera, puede añadir sus preferidos a la sección de comentarios.
-Sueños de Nieve, de Eric Carle
Quizás entre los mucho más populares, de la mano del respetado Eric Carle, creador del muy famoso libro L’Eruga Glotona. Sueños de Nieve es un libro sencillísimo pero al unísono adictivo. Una composición repetitiva, con los copos de nieve cubriendo a los individuos.
Un libro con solapas que, sin llamar a Papá Noel, nos muestra una cálida historia de un granjero que festeja la Navidad con sus animales, vestido igual como lo realiza Santa Claus. Puedes leer nuestra reseña de Sueños de Nieve para conocerlo intensamente.