1 michael löwy marxismo y religión opio del pueblo

Por Jon Y también. Illescas

En el tercer mes del año de 1871, Karl Marx, entonces ocupado en proteger La Común de París desde su situación de dirigente de la En todo el mundo, tuvo tiempo de proseguir sus estudios históricos robándole tiempo durante la noche, esto es, en su historia. De esta forma, en una carta íntima apuntada a Engels, que no vio la luz hasta bastante después merced al trabajo de Riazánov adelante del Centro Marx-Engels de Moscú, intentando el tema del retardo del movimiento obrero en América Latina con en comparación con europeo, le escribió su amado amigo:

Un futuro con Marx

Lo ha dicho Derrida: «No va a haber futuro sin eso. No sin Marx. No hay futuro sin Marx, sin memoria y sin herencia de Marx». Después lo ha dicho Balibar: «Se proseguirá leyendo a Marx en el siglo XXI, no como un creador del pasado, sino más bien contemporáneo». Y el día de hoy ahora hay un extenso consenso cerca de esto: por mucho más finito que Marx va a llegar a parecer bajo los escombros del Muro, por mucho más finalizado que en un instante particular pareciese la historia a charlatanes como Francis Fukuyama, Marx se ha levantado y hechó a caminar así como el Che Guevara aseguraba que lo haría la «enorme humanidad» en un inolvidable alegato frente a la ONU en 1964.

cristianismo

La crisis sistémica abierta en el 2008 logró al marxismo recobrar el atrayente y la vigencia de esto lo afirmaba el últimamente fallecido Zygmunt Bauman—«una utopía a conciencia crítica que deja al descubierto la relatividad histórica de los valores capitalistas y sus restricciones, eludiendo conque se afiancen como principios incontrovertibles de los pies en el suelo». Y esta constatación fué dando rincón, en los últimos tiempos, a la publicación de una sucesión de ensayos en los que se vindica el marxismo al unísono que se ejerce una suerte de puesta próximo o de cepillado; de lo que los italianos llaman aggiornamento. En 2011 Terry Eagleton lanzó al mercado editorial el hasta la actualidad mucho más exitoso de ellos, que se titula Por qué razón Marx llevaba razón. En el 2013 el hispanocubano Iván de la Nuez proclamaba que «un espectro regresa a recorrer el planeta» y publicaba al unísono El comunista manifiesto. Y ese año César Rendueles termina de llevar a cabo lo mismo con un pequeño ensayo En defensa del materialismo histórico.

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